Tahití y Bora Bora son destinos que forman parte de la imaginación de cualquiera, asociado a unas vacaciones inolvidables. Elegidos por las parejas en luna de miel o como una alternativa romántica a la boda tradicional, estos pedazos de tierra perdidos en el Pacífico Sur, son obligatorios.

Es evidente que para nosotros los europeos (con la excepción de los franceses), un viaje a la Polinesia Francesa no es exactamente lo que puede llamarse una "baratija", pero el esfuerzo financiero es bien recompensado con su exótica belleza. Los cinco archipiélagos que la forman (Sociedad, Tuamotu, Marquesas, Gambier y Australes), se extienden sobre 4,5 millones de kilómetros cuadrados de océano y están formados por islas y atolones de origen volcánico o de Coral (formado por la acumulación de corales).

¿POR QUÉ IR?

Descubra "la verdadera Tahití" en las zonas costeras de las islas - Huahine, Moorea, Y Rangiroa.
Las playas limpias, las aguas cristalinas, y los hoteles 5 estrellas hacen de la Polinesia Francesa el exponente de viajes de lujo.

 
Podrá ver los delfines jugando en el agua y hasta dar de comer a los tiburones.

 
EVITAR

Bodas – son legales, sólo para los residentes locales.

ORIENTACIÓN

Sea cual sea su destino, es obligatoria una visita a Bora Bora. Con 9 km de largo y 4 km de ancho, es fácil recorrer la isla. El camino que sigue la costa es casi siempre plano, por lo que es muy fácil alquilar una bicicleta para disfrutar de la tranquilidad del paisaje tropical. Para aquellos que no pueden o no quieren pedalear, hay siempre disponibles vehículos de motor.

 
CUANDO IR

 
La temporada de lluvias se produce durante el periodo de diciembre a abril. Las tormentas tropicales son cortas y dan lugar al sol. De julio a octubre es la estación seca, pero las noches suelen ser frescas. La temperatura es suave y varía entre 24 y 28º C. El clima es como en Hawai, pero como la Polinesia Francesa se encuentra al sur del ecuador, las estaciones del año son inciertas.

CÓMO LLEGAR

 
La Polinesia Francesa está por debajo del ecuador, entre América del Sur y Australia. Papeete y Tahiti ofrecen varias conexiones aéreas con Europa y los Estados Unidos. Para información sobre los vuelos consulte Air Tahiti Nui (www.airtahitinui-usa.com), Air France (www.airfrance.us), LAN (www.lan.com), Hawaiian Airlines (www.hawaiianairlines.com), Air Tahití (www.airtahiti.com), o el ferry Tahití-Moorea (www.aremiti.pf).

 MOVILIZARSE

Cubiertos los 6 km que separan el aeropuerto del centro de Papeete, se encontrará con una ciudad caótica, de edificios bajos, degradados e inusuales. Nada de atractivos parece sobresalir del conjunto. Sólo durante un paseo a pie, sin grandes dificultades para recorrer las calles principales, comienza a surgir algo de organización en medio del caos. Y la organización no significa belleza, tranquilidad o equilibrio arquitectónico. Quiere apenas decir interés, color, energía de ambiente y diversidad cultural. Sin embargo, estas son las principales características que hacen de la capital de Tahití un lugar para visitar.

Air Tahiti (distinta de Air Tahiti Nui) ofrece varios vuelos a Bora Bora, Huahine, Rangiroa y Moorea, y para la illhas Tuamotu Manihi y Fakarava y las Islas Marquesas y de Nuku Hiva Hiva Oa.

Estos vuelos van desde 7 minutos (de Papeete a Moorea) a casi 4 horas (de Papeete a Nuku Hiva). Los transbordadores son la opción que sale más a cuenta, pero más allá de los agradables 25-45 minutos de viaje entre Papeete y Moorea, los viajes entre las islas pueden ser largos y agotadores. En la isla, usted se dará cuenta de que las carreteras están bien pavimentadas y los autobuses locales (operado por Le Truck) son regulares. Si usted decide alquilar un coche (hay agencias de alquiler de coches Avis y de Budget en los principales aeropuertos) sólo necesitará una licencia de conducir válida.
Bora Bora es un lugar especial. El verde esmeralda de las tranquilas aguas del Pacífico se confunde con el azul intenso del cielo, con los matices de la vegetación y la arena blanca, en una combinación excepcional.

Se llega por aire y aterriza en la pequeña isla de Motu Ute. Aquí, los árboles de coco y las palmeras están por todo el borde de la pista de aterrizaje. El terminal es un pequeño edificio de madera y una pasarela, también de madera da la bienvenida a las embarcaciones de lujo de los hoteles que van a buscan a los turistas (con collares de flores en el cuello).

 
La duración del viaje en barco hasta el hotel varía dependiendo de la distancia, pero nadie mira el reloj. Sólo el mar transparente y la vista de las cimas de las montañas de Pahia y Otemanu (que dominan el paisaje de la isla de Bora Bora), centran la atención de todos.

INFORMACIÓN

La principal oficina de turismo se encuentra en Papeete, el pie del muelle de cruceros (www.tahititourism.com). Allí encontrará un staff que habla inglés, así como mapas e información detallada sobre la mayoría de las islas.

Existen oficinas de turismo en Moorea (www.gomoorea.com) y en el aeropuerto de Huahine, pero están a cargo de operadores privados que no están asociados a la plataforma oficial de turismo de la Polinesia Francesa.

Sepa que además de Bora Bora, Tahití también tiene una fuerte belleza, con sus montañas, valles y cascadas, cuevas, vegetación y playas de arena blanca y negra.

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